domingo, 11 de octubre de 2009

¿Estética negativa?

Hoy ví una exposición de lo que nombran arte contemporáneo, observé...observé y es ahora que recuerdo un libro que leí hace muchos años, muy interesante por cierto. Herbert Read en su libro “Imagen e Idea”, afirma que la concepción y la representación del arte cambia conforme cambia la ideología y la situación social del hombre. Se puede ver claramente en el aspecto utilitario que tenía el arte en la antigüedad, en el texto, se menciona la diferencia de paisajes, materiales e incluso los avances tecnológicos que de manera muy importante, ejercen una influencia en los conceptos generales del hombre.


Sumidos en el consumismo, no estamos tan dispuestos a la contemplación sin ningún otro objetivo que observar, buscamos siempre una razón práctica para todo, el hombre moderno tiene como lema “time is money”, eso sea tal vez, el motivo por el cual es renuente a las nuevas formas de expresión artística, la contemplación por la contemplación requiere de un tiempo suficiente libre de prisas y tensiones, características que difícilmente el hombre pueda abandonar en la era del consumo y la producción masiva.

La fotografía, la televisión, el cine, internet, teléfono, etc. son materia prima de los nuevos artistas, sin embargo, también los creadores buscan alejarse de lo que éstas nuevas tecnologías le han arrebatado al hombre moderno: la capacidad de asombro. Ya no hace falta, para realizar un retrato, que la pintura sea apegada a la realidad, existe la fotografía para eso. Los efectos surrealistas los vemos en las pantallas de cine. Lo que no se ha perdido de vista es, que a través del arte, el artista manifiesta una idea relacionada con su particular realidad, un ejemplo claro son las manifestaciones artísticas que hacen uso de chatarra, plásticos, basura reciclada, vidrio, etc. Esto no sólo en lo que artes visuales se refiere, se observa en todas las disciplinas artísticas.

La sensación que me dejó la exposición fue extraña, sobre todo porque a mi alrededor había personas que externaban su punto de vista de manera muy audible, alguien cuestionó la existencia de la creación artística en la actualidad, que si era estética negativa, que si eso no era arte...un sin fin de opiniones positivas y negativas, a favor o en contra de la obra expuesta. Yo la verdad me dejé llevar, muchos filósofos modernos hanh llegado a la misma conclusión de los filósofos antiguos: el estado ideal del hombre es la contemplación. El arte ha dejado de ser utilitario, en siglos pasados el arte tenía un propósito práctico, ya fuera un retrato, una catedral, un réquiem...etc., ahora, aunque las viejas escuelas persisten, el arte ha llegado a ser puramente contemplativo; es decir, el encuentro sujeto-objeto en espera de alguna reacción, la que fuera. Pero creo que seguimos buscando una utilidad al arte, aunque sea decorativa.

La modernidad ha atrapado al hombre, y lo ha atrapado precisamente en lo que fue causa de las revoluciones y guerras que formaron la historia universal: explotación, desigualdad, consumismo, políticas imperialistas. El hombre cayó en su propia trampa.

La creación artística siempre es posible, es una necesidad innata que tenemos todos los seres humanos, los dibujos infantiles, los juegos de ser cantantes o actores, escultores de plastilina, arquitectos que planean casas de bloques de colores nos lo indican.

Aunque la modernidad se traga al ser humano en cuanto entra de manera activa a la sociedad, la creación artística es posible, no importa si se apega a los conceptos clásicos de la estética o se innova con formas de llamar la atención en medio de un sistema que inhibe muchas veces nuestros sentidos y nuestra necesidad de detenerse un momento a la contemplación. Yo de verdad deseo que así sea.

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